Muchas empresas confían en los centros de datos para albergar los grandes volúmenes de datos que producen a diario. Los centros de datos ofrecen comodidad, ya que permiten el almacenamiento de datos de alta capacidad que permite a las empresas eliminar los servidores almacenados en las instalaciones y los costes de administración y mantenimiento asociados. Mucho se ha escrito sobre los altos niveles de ciberseguridad necesarios para proteger los centros de datos y, sin embargo, dado que estas instalaciones están cada vez menos gestionadas, la seguridad física sigue siendo una preocupación.
Tras un aumento en los intentos de intrusión en los centros de datos, notable en un caso reciente relacionado con un intento de complot para estallar un centro de datos importante en EE. UU., los gerentes y los equipos de seguridad buscan mejorar drásticamente su protección en seguridad física. Al considerar la acción que se debe tomar para mitigar tal amenaza, la introducción de soluciones de seguridad física de vanguardia es obvia. Pero lo que no siempre es evidente es el poder que poseen tales soluciones para maximizar la seguridad y la protección cuando están interconectadas.
Innovaciones en radar y vídeo en red
Las cámaras de red ya han evolucionado hasta el punto en que se pueden usar análisis integrados para categorizar el movimiento (es decir, intrusión en lugar de merodeo) y para diferenciar personas, de vehículos y objetos, en el perímetro. Tal es la precisión de las cámaras modernas que el número de falsos positivos se reduce considerablemente. Además, el procesamiento basado en el dispositivo garantiza que solo los datos más necesarios se devuelvan a través de la red para su análisis, lo que ayuda a una toma de decisiones más rápida. Para los gerentes y el personal de seguridad, esto equivale a un ahorro considerable de tiempo y dinero con solo incidentes verificados marcados para investigación.
Yendo un paso más allá, la fusión de radar y vídeo dentro de una sola cámara da como resultado una solución que puede detectar con precisión el movimiento de objetos en áreas amplias. Se puede determinar la velocidad y la distancia de cualquier objeto detectado por el radar, proporcionando datos que complementan la información visual captada por la cámara de red. Esta combinación de radar y vídeo lo convierte en una herramienta de detección muy poderosa, capaz de analizar una escena independientemente del clima o las condiciones de luz y proporcionar datos procesables en tiempo real sobre cualquier actividad a medida que se lleva a cabo.
Tecnologías conectadas y autónomas
Si bien las últimas soluciones de seguridad física pueden desempeñar un papel vital en la protección del centro de datos, es la capacidad innovadora de estas tecnologías para comunicarse de manera efectiva entre sí, lo que da como resultado un sistema verdaderamente inteligente que es en gran medida autónomo. Dado que los centros de datos modernos suelen estar no gestionados, esta capacidad de confiar en tecnologías de seguridad física interconectadas para monitorear el perímetro de manera efectiva es invaluable. Las capacidades de administración remota permiten al personal de seguridad monitorear incluso las áreas más difíciles de alcanzar en cualquier momento, con notificaciones enviadas a través de un dispositivo móvil en caso de un incidente. Este enfoque ayuda a mantener la seguridad de los datos al evitar cualquier medio posible de entrada no autorizada al sitio y los posibles daños causados.
Como ejemplo, una solución de radar y cámara puede detectar movimiento en el borde del perímetro, con análisis potentes utilizados para aclarar y clasificar. Mientras tanto, una cámara térmica se activa automáticamente y entra en acción para detectar un rastro de calor y más evidencia de que un ser humano ingresa al área, antes de que se emplee una cámara de giro, inclinación y zoom (PTZ) para un seguimiento más detallado del movimiento a medida que se acerca el intruso, con un altavoz de audio IP configurado para reproducir un mensaje automático para advertir y disuadir. Como medida adicional, se prepara una sirena estroboscópica IP para emitir un pulso de luz y una ráfaga de sonido simultáneos como advertencia final. En este escenario, solo se llama al personal de seguridad cuando es absolutamente necesario, ahorrando tiempo y recursos.
Por supuesto, la amenaza para los datos y el equipo del centro de datos puede provenir de otros factores además del criminal. Dentro de la instalación, las cámaras infrarrojas se pueden usar como el primer puerto de escala para detectar fugas de gas o humo, mientras que otras cámaras y sensores conectados pueden identificar fugas de agua o reconocer que una puerta del servidor se ha dejado abierto. Las cámaras métricas térmicas pueden desempeñar un papel fundamental a través de su capacidad para detectar cualquier aumento en la temperatura ambiente que pueda indicar un problema mayor. Una cámara métrica térmica utilizada para monitorear los generadores de energía del centro de datos, por ejemplo, puede detectar la más mínima fluctuación de temperatura, con una alarma configurada para sonar una vez que se alcanza un umbral de temperatura predeterminado.
Alianzas para la protección integral
Cuando se piensa en medidas de seguridad física, existe la tentación de elegir productos listos para usar en un intento por encontrar una solución rápida a un problema. Sin embargo, se requiere un enfoque más metódico mediante el cual se evalúen completamente los riesgos y se establezcan las medidas de seguridad adecuadas. Por ejemplo, el Centro para la Protección de la Infraestructura Nacional (CPNI) del Reino Unido ha desarrollado guías y estándares para todos los sitios de Infraestructura Nacional Crítica (CNI); esto incluiría centros de datos debido a su prestación de servicios que se consideran esenciales.
Asociarse con un proveedor confiable de soluciones de seguridad física que hayan sido aprobadas por las autoridades locales relevantes, brindará a los administradores de centros de datos garantías de que los productos que eligen son de la mejor calidad y se consideran capaces de cumplir con altos estándares. Al seleccionar herramientas que también están a la vanguardia en términos de innovación, los centros de datos se beneficiarán de soluciones de seguridad física autónoma conectada que brindan protección con los niveles más altos.