Las áreas peligrosas en las que los materiales inflamables, como el gas o el polvo, pueden aumentar el riesgo de explosión son habituales en entornos que van desde plantas petroquímicas hasta plantas de procesamiento de alimentos.
A menudo, es fundamental o beneficioso utilizar equipos eléctricos en estos entornos. Esto incluye el uso de cámaras de red para garantizar la salud, la seguridad y la eficiencia operativa. No obstante, cualquier equipo eléctrico debe estar certificado para su uso en estas áreas, ya que, de lo contrario, podría emitir chispas, arcos o causar superficies calientes suficientes como para provocar la combustión de un gas o polvo inflamable, lo que podría causar una explosión catastrófica.
Definición de áreas peligrosas
Un área peligrosa es aquella en la que una atmósfera potencialmente combustible debido a gas o polvo está presente de forma continua o durante periodos de tiempo más cortos. Estas ubicaciones se dividen en Divisiones (en Norteamérica) o Zonas (en el resto del mundo).
La Zona/División 1 es una ubicación en la que una atmósfera combustible está presente durante periodos de tiempo más largos, normalmente en el área de producción. Las áreas más alejadas de la fuente del material inflamable, donde las concentraciones descienden y el riesgo de explosión es mucho menor, pero aún es posible, se definen como áreas de Zona/División 2.
El reto para la Zona/División 2
Para las cámaras de vigilancia utilizadas en el área de la Zona/División 1, el único método práctico de protección contra explosiones es una carcasa externa robusta alrededor de toda la cámara, normalmente fabricada en acero inoxidable o aluminio. La carcasa no está diseñada para evitar que el gas explosivo entre en ella, sino para evitar que cualquier arco y chispa creados por la cámara se puedan propagar al exterior, lo que podría provocar la combustión del material inflamable en la atmósfera.
Las áreas de Zona/División 2 no requieren necesariamente el uso de una carcasa externa, conocida como carcasa «Ex d», siempre que el diseño no permita que se produzcan arcos o chispas desde los componentes electrónicos y que la temperatura no pueda superar ciertos niveles.
Sin embargo, dada la falta de alternativas, la única opción para muchas organizaciones para la vigilancia en áreas de Zona/División 2 ha sido utilizar cámaras con protección para entornos explosivos más caras certificadas para Zona/División 1 o, potencialmente, renunciar por completo al uso de cámaras de vigilancia en estas áreas. La primera opción suele significar que se utilizan menos cámaras de lo que sería ideal, lo que da como resultado una cobertura menos amplia. La segunda opción, por supuesto, significa que no hay vigilancia en las áreas de Zona/División 2, lo que crea un riesgo significativo para la salud y la seguridad, así como una reducción de la eficiencia operativa.
Una nueva generación de cámaras con protección para entornos explosivos
En la actualidad, hay disponibles cámaras con protección para entornos explosivos diseñadas y certificadas específicamente para los requisitos establecidos para las ubicaciones peligrosas de la Zona/División 2. El diseño impide que la cámara proporcione suficiente energía como para inflamar el gas o el polvo en la atmósfera y provocar una explosión. Este diseño incluye una protección interna, así como los medios para asegurar mecánicamente los conectores de cables que evitan la desconexión accidental, eliminando el potencial de transición de energía y evitando el riesgo de chispas, arcos o sobrecalentamiento.
Al ser más pequeñas, ligeras y fáciles de instalar, reducen significativamente el coste total de propiedad. Y, para las organizaciones en las que el uso de cámaras con protección para entornos explosivos en áreas de Zona/División 2 era prohibitivo en términos de costes, el desarrollo de cámaras específicas para estas áreas está ampliando las medidas de salud y seguridad, y las oportunidades para mejorar la eficiencia operativa.
Las nuevas cámaras también incluyen analíticas y funciones que incluyen aviso de humo e incendio para una prevención precoz, detección de EPIy supervisión de áreas restringidas, mejorando aún más la seguridad.
Las normativas para cámaras de Zona/División 2 no son menos estrictas que para las de Zona/División 1. Las cámaras certificadas deben haber sido probadas y aprobadas según la norma IEC 60079 Zona 2, 22 áreas peligrosas, así como para Clase I/II/III División 2, reconocida en Norteamérica.
Como es habitual en el desarrollo de cualquier cámara con protección para entornos explosivos, el fabricante también necesita un sistema de gestión de calidad auditado de forma independiente para garantizar la conformidad entre el producto comprobado y el fabricado.
Ventajas en múltiples entornos
El desarrollo de las cámaras con protección para entornos explosivos de Zona/División 2 ofrece ventajas para instalaciones tanto grandes como pequeñas.
Por ejemplo, los operadores de plantas de petróleo y gas que actualmente utilizan cámaras aptas para Zona/División 1 en áreas de Zona/División 2, que suelen ser áreas mucho más grandes, las nuevas cámaras presentan una importante oportunidad de ahorro de costes y la posibilidad de ampliar la cobertura de vigilancia detallada en el área de Zona/División 2.
Muchas organizaciones e instalaciones más pequeñas con áreas peligrosas de Zona/División 2 eligen no utilizar en absoluto cámaras de vigilancia protegidas contra explosiones debido al coste prohibitivo que supone tener que utilizar cámaras certificadas para Zona/División 1 en estas zonas. Gracias a la introducción de cámaras de Zona/División 2, ahora pueden beneficiarse de una mejora de la salud y la seguridad, así como de la eficiencia operativa en toda su instalación. Esto puede incluir sectores como la producción farmacéutica, los silos agrícolas para el almacenamiento de granos, las plantas de producción de alimentos, los aserraderos, etc.
Clasificación de Zona/División que mejora la elección de cámaras
Las organizaciones que dirigen instalaciones donde existen zonas peligrosas conocerán bien las diferentes clasificaciones y requisitos normativos para cualquier equipo eléctrico utilizado en cada una de ellas. Los incumplimientos tendrán graves consecuencias: multas potenciales mínimas, pero que suponen un riesgo mucho más grave para la seguridad de los empleados.
Para la videovigilancia en áreas peligrosas de Zona/División 2, la elección ha sido difícil. Se pueden utilizar cámaras de Zona/división 1 más caras o renunciar por completo a la videovigilancia. Ninguna de estas opciones es ideal.
Pero a día de hoy, se ha eliminado esta disyuntiva. Hay disponibles cámaras de vigilancia certificadas para su uso en áreas de Zona/División 2, lo que aporta a estas áreas una videovigilancia de alta calidad y analíticas avanzadas. Con ellas, se mejoran la salud y la seguridad, además de tener la oportunidad de optimizar la eficiencia operativa.
